Cocinar la acelga solamente con el agua del lavado y un poco de sal. Cortarla bien chica, incluyendo la parte tierna de las pencas. Rehogar las cebollas y los ajos en el aceite y la manteca, con un poco de sal.
Incorporar la acelga, saltear unos minutos, retirar y pasar a un bol.
Dejar entibiar y agregar el queso rallado y el almidón de maíz. Mezclar bien.
Incorporar 6 huevos e integrar la preparación. Condimentar con sal, pimienta y nuez moscada a gusto. Luego reservar.
Forrar un molde para tarta alto o una tortera de 24 a 26 cm. de diámetro (dependiendo de la altura que se le quiera dar a la tarta), previamente enmantecado, con una tapa de masa, cubriendo bien el fondo y los costados.
Volcar el relleno de acelga (dejando un borde de masa libre), hacer cinco huecos y cascar un huevo en cada uno.
Distribuir fetas gruesas de queso fresco en la superficie y condimentarlas con pimienta.
Cubrir con la otra tapa de masa, unir formando un repulgo, pincelar con huevo y realizar un pequeño orificio a modo de chimenea.
Cocinar en horno precalentado a temperatura moderada por espacio de aproximadamente 40 minutos. Retirar, dejar entibiar y desmoldar. Puede servirse tibia o fría.