Colocar en un recipiente grande la calabaza cortada en cubos junto con el azúcar. Dejar hasta el día siguiente para que el azúcar se disuelva junto con el jugo que suelta la calabaza.
Volcar todo en una cacerola y llevar al fuego.
Dejar cocinar con la cacerola destapada durante 30 minutos.
Apagar y dejar hasta el otro día.
Repetir en total 3 veces lo mismo y el último día dejar hasta que tome consistencia de mermelada.
Apenas pronta poner en frascos de vidrio y dejar enfriar.