Las cantidad de azúcar es aproximada, ya que una vez preparada la fruta se debe pesar y luego, de acuerdo a su peso se le agrega la cantidad de azúcar. Pelar las naranjas, y los pomelos tratando de sacar la cáscara junto con la parte blanca.
Cortar las frutas a la mitad y exprimirlas extrayendo su jugo y quitando las semilla. Reservar el jugo.
Cortar cada mitad de fruta en tiras finas.
Pelar las manzanas, quitarles las semillas y cortarlas en cubos chicos.
Pesar las manzanas junto con el jugo de las frutas y las naranjas y pomelos cortados en tiras. Calcular 600grs de azúcar por cada quilo de fruta.
Colocarlas en una cacerola intercalando una capa de fruta y una de azúcar.
Dejarlas reposar una o dos hora antes de comenzar su cocción.
Luego llevar a fuego moderado, revolviendo cada tanto.
Dejar cocinar un rato y luego apagar el fuego y dejar hasta el día siguiente.
Al otro día continuar su cocción, revolviendo más seguido a medida que va tomando su punto.
Envasar en caliente en frascos bien limpios y secos, previamente templados.