| PREPARACIÓN Poner en un bol la manteca junto con el azúcar.
Mezclar con una espátula hasta formar una crema. Luego incorporar la harina de a poco alternando con las claras hasta formar una masa que se pueda esparcir. Dejar reposar en la heladera durante 30 minutos. Enmantecar una placa de horno o emplear planchas siliconadas.
Tomar con una cuchara parte de la preparación y esparcirla sobre la placa en forma de círculo de aproximadamente 14 centímetros de diámetro. Conviene cocinar de a poco por vez. Por ejemplo dos o tres como máximo.
Llevarlo a un horno medio durante 8 minutos o hasta que la preparación esté dorada y sus bordes cocidos. Retirar de a uno con ayuda de una espátula y tener al lado un palo de aproximadamente 20 centímetros de largo por 2 centímetros de diámetro. Enroscar la masa rápidamente en el palo y retirarlo.
Repetir lo mismo con los demás. Esta operación se debe hacer rápido antes que se enfríe la masa para poder darle la forma sin que se quiebre. Continuar la cocción de la misma forma hasta terminar la masa.
Una vez prontos se bañan las puntas con chocolate cobertura.
Se pueden comer así o emplearlos para decorar postres o helados.
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