Hacer en primer lugar la salsa de miel, poniendo en una cazuela un poco de grasa del pato con las cebollas bastantes picadas. Cuando comience a dorarse, añadir un chorrito de vinagre y la miel. Dar varias vueltas y reducir esta salsa durante tres minutos a fuego fuerte. Incorporar luego el caldo de carne y dejar que se reduzca hasta 1/3 de su volumen.
Sacar los confit de su grasa, y ponerlos en un recipiente en el horno, durante 5 minutos a 200º C. de temperatura y después a 280º .
Deshuesar la parte alta del muslo, dejando el último hueso de la pata para que conserve una forma bonita. Colocarlos en plato con salsa de miel.