Paso 1: Debe utilizarse el pescado entero y descamado (sin destripar) para que no tome mucha sal. Se coloca la dorada seca en una fuente grande de barro, tras poner en la base una buena capa de sal. Después se tapa con el resto de la sal, cubriéndola totalmente. Finalmente se echa por encima un poco de agua que debe ayudar a formar una costra de sal encima del pescado. Paso 2: Se mete en el horno ya caliente previamente a 180º durante unos tres cuartos de hora aproximadamente.
Paso 3: Una vez sacado del horno hay que romper la costra con un instrumento duro (no descarte un martillo). Se limpia el pescado, sirviendo su deliciosa carne con las salsas recomendadas.