Paso 1: Se pone el agua con el azúcar al fuego y sin tocarlo se espera que coja punto de bola fuerte, se le añade unas gotas de limón, y se deja espesar, entonces se le añaden las almendras dando vueltas sin parar a fuego medio con cuchara de madera. Paso 2: Cuando empiece a tomar color se aceita suavemente un mármol y la hoja ancha de un cuchillo; se vuelca la masa sobre el mármol y con el cuchillo se le va dando vueltas hasta que vaya enfriando.
Paso 3. Cuando este ya tibio se aceita también una botella de vino y se le acopla la masa dejándola enfriar del todo así, para que tome forma de teja. Cuando enfrié del todo se puede retirar el molde.
No hay que desanimarse si no sale bien a la primera, el guirlache no es difícil pero hay que cogerle el punto.